10/06/2006

ULTIMAS VISITAS AL CINE (I)


“Piratas del Caribe : El cofre del muerto” .Gore Verbinsky el director de la primera parte vuelve al abordaje con una nueva historia del pirata Jack Sparrow en una película familiar y autoparódica, donde antes había espectáculo ahora hay exceso y las escenas de acción parecen imaginadas más para un videojuego o un futuro parque de atracciones ( la jaula pendular, la rueda giratoria) que para una historia coherente. Los personajes cada vez más pueriles y las interpretaciones sobreactuadas. Tan sólo me parece destacable en la película la actualización de los mitos marineros ( El holandes errante, o ese impresionante Kraken) que dan cierta vida ala historia , quedando lo demás en una película para consumo familiar tras la cual hay una gran operación de marketing para mayor gloria del cine comercial Hollywoodense.
“La joven del agua” de M. Shayanaman es una bonita aproximación del director del sexto sentido al cuento de hadas adultos, si tal género existe ya que el fin de estos cuentos es una aproximación al mundo de la fantasía infantil y al aprendizaje que se desprende de los mismos. La historia , muy bien contada, sorprende en el director del sexto sentido por su aire surrealista propio de David Lynch antes de que se le fuera la cabeza, sin necesidad de un último giro inesperado del guión, que la narración no necesita. Destaca también la excelente interpretación de Paul giamatti y del elenco de secundarios aunque curiosamente el personaje que se reserva el director resulta el más cargante del film. Una película para ver con ojos de niño.
“Alatriste” de Agustín Díaz Yanes , es un arriesgado intento del cine español de ofertar una superproducción histórica rentable en las salas de cine. Con las historias del espadachín de Arturo Pérez-Reverte parece que el invento les ha funcionado, aunque no es una película redonda es de esperar a que esto ayude a que en España se empiecen a hacer producciones similares que llamen al público a las salas en lugar de las historias de siempre contadas por la gente siempre. La película arranca con una buena escena de acción que nos introduce rápidamente en los personajes y su sentido en la historia y aunque luego tiene grandes cambios de ritmo llegando al hastío en determinados momentos, que provoca que la narración quede excesivamente deslabazada ( es el problema lógico de meter el argumento de siete libros en una sola película) remonta el vuelo en su última parte con la inolvidable batalla final y la heroica pose del protagonista que no cambia la vida por el honor de su regimiento. Al igual que el ritmo las interpretaciones también son irregulares desde las excelentes composicones de Viggo Mortensen como Alatriste o Juan Echanove y Javier Cámara como Quevedo y Olivares hasta las más artificiales de Eduardo Noriega haciendo de sí mismo o de Blanca Portillo como el inquisidor Bocanegra que interpretando un personaje masculino resulta una extravagancia en una producción de este estilo. En todo caso nada de esto desmerece el encomiable intento del director por recuperar el género de aventuras para el cine patrio tan sobrado siempre de dramas y tan necesitado de historias que merezcan ser contadas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Solo puedo opinar de las dos películas q vi, "La joven del agua" y "Alatriste", y me gustaron las dos. La primera es un cuento bonito,de los que me gustaban cuendo era pequeña, de hadas y duendes, de cosas mágicas. Solo un detallito curioso, jajajaja, el cambio del color del pelo de la protagonista, al principio era pelirroja y luego rubia, debió de ser que con tanta agua se le fue el tinte, jajajaja.
En cuanto a Alatriste, ni siquiera se me hizo larga, la verdad es que estuve más atenta a los detalles históricos que a la propia historia del personaje. Se nota que hubo una buena investigación previa y detalles muy cuidados, como el vestuario. La volvería a ver. Esa época en concreto es una de mis favoritas, seguramente porque me gustó mucho una asigantura que tuve "Cultura y mentalidad de la Epoca Moderna", la profesora era muy buena y apredí mucho sobre la manera de ver la vida en ese siglo. Yo creo que incluso la lentitud de la que muchos se quejaron es propia de la época, antes las cosas iban más despacio, las prisas y la acción trepidante es una característica de la postmodernidad. Un fallo que cometemos muy a menudo es ver la historia desde nuestra mentalidad actual, analizarla con nuestros valores, lo mejor es estudiar primero la ideología y los valores de cada época y luego analizar los hechos a la luz de esa mentalidad, es la única manera de entender por qué sucedieron así y no de otra forma.
Ya tienes el comentario, ahora me debes una historia que sabes que me intriga.

Anónimo dijo...

Me gustaría hacer un comentario sobre "La joven del agua",peor no puedo porque le destriparía la película a todo el que aún no la haya visto,así que seré buena y me abstendré de manifestar mi opinión.